El incumplimiento en el pago de facturas negociables tiene implicancias legales, financieras y reputacionales que afectan a las empresas involucradas. En el Perú, la normativa vigente establece un conjunto de sanciones financieras por impagos de facturas para los actores que incumplen sus obligaciones, regulando las prácticas de emisión, adquisición y transferencia de facturas negociables. Este artículo detalla las sanciones aplicables, las infracciones más comunes y el marco normativo que regula estas operaciones.
¿Qué es una Factura Negociable y su Importancia Legal?
Una factura negociable es un título valor emitido por una empresa que representa una cuenta por cobrar. Este documento permite a las empresas acceder a financiamiento al transferir su derecho de cobro a terceros, como inversionistas o entidades financieras. Su mérito ejecutivo la convierte en un instrumento legal poderoso, facilitando el cobro judicial en caso de incumplimiento. Las facturas negociables no solo dinamizan el flujo de caja de las empresas, sino que también están respaldadas por un marco normativo que garantiza su transparencia y cumplimiento, imponiendo sanciones para quienes incumplen con sus obligaciones.
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¿Qué sucede si la factura negociable no es pagada?
Si, a pesar de la titulización, el deudor no cumple con el pago de la factura negociable, el titular del instrumento (generalmente un inversionista o entidad financiera) puede iniciar acciones legales para recuperar la deuda. Estas acciones están respaldadas por el mérito ejecutivo del título valor, lo que simplifica el proceso judicial. En caso de que el cobro sea infructuoso, la empresa que emitió la factura puede registrar la pérdida como incobrable, obteniendo un beneficio fiscal al deducir su base imponible. Por otro lado, para la empresa deudora (adquirente) podría tener sanciones financieras por impagos.
¿Cuáles son las sanciones financieras por impagos de facturas?
Existen diferentes sanciones financieras por impagos. Todas están reguladas por la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria «SUNAT». Estas sanciones están dirigidas tanto para el adquirente de la factura y el emisor de la factura, los que pueden llegar a ser multados con elevadas UIT (Unidad Impositiva Tributaria) dependiendo de la infracción cometida.

Infracciones y Sanciones para el Proveedor o Emisor de la Factura
El proveedor o emisor de la factura es responsable de garantizar la transparencia y legalidad del proceso de emisión y transferencia de las facturas negociables. El incumplimiento de estas obligaciones genera sanciones que buscan prevenir prácticas desleales o negligentes.
Principales Infracciones y Sanciones
- No informar al tenedor legítimo sobre la disconformidad comunicada por el adquirente:
- Calificación: Muy grave.
- Sanción: Multa de hasta 50 UIT.
- No notificar a la Institución de Compensación y Liquidación de Valores (ICLV) sobre disconformidades dentro del plazo legal:
- Calificación: Muy grave.
- Sanción: Multa de hasta 50 UIT.
- No registrar los pagos ante la ICLV:
- Calificación: Leve.
- Sanción: Multa de hasta 1 UIT.
- Ocultar información relacionada con pagos en cuotas:
- Calificación: Grave.
- Sanción: Multa de hasta 50 UIT.
- Retener pagos que han sido transferidos a terceros:
- Calificación: Muy grave.
- Sanción: Multa de hasta 50 UIT.
Estas sanciones están diseñadas para fomentar la transparencia y asegurar que los legítimos tenedores de las facturas puedan ejercer sus derechos de cobro sin impedimentos.
Infracciones y Sanciones para el Adquirente de la Factura
El adquirente de una factura negociable tiene la obligación de garantizar el flujo adecuado del proceso, proporcionando la información necesaria y respetando los derechos del tenedor legítimo.
Principales Infracciones y Sanciones
- No proporcionar información como el correo electrónico requerido por la ICLV:
- Calificación: Grave.
- Sanción: Multa de hasta 20 UIT.
- Impugnar dolosamente la factura, mostrando disconformidad sin fundamentos válidos:
- Calificación: Muy grave.
- Sanción: Multa de hasta 50 UIT.
- Limitar la transferencia o circulación de la factura negociable:
- Calificación: Muy grave.
- Sanción: Multa entre 20 y 50 UIT.
- No pagar al tenedor legítimo tras ser notificado de la transferencia:
- Calificación: Grave.
- Sanción: Multa entre 10 y 20 UIT.
Estas sanciones buscan evitar prácticas desleales y asegurar que las facturas negociables cumplan con su propósito de optimizar la liquidez empresarial.
Entidades Reguladoras y su Rol
SUNAT
La Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria supervisa el cumplimiento fiscal de las empresas y regula las deducciones por deudas incobrables, asegurando que estas se realicen conforme a la normativa tributaria.
Cavali
Como registro central de valores, Cavali garantiza la seguridad y autenticidad de las facturas negociables, promoviendo la transparencia y facilitando su negociación en el mercado.
Tribunales de Justicia
Gestionan los procesos legales relacionados con el cobro de facturas negociables, amparados por el mérito ejecutivo del título valor.
Impacto de las Sanciones Financieras por Impagos en las Empresas
El incumplimiento en la gestión de facturas negociables puede generar consecuencias graves:
- Deterioro de la reputación: Afecta la credibilidad y dificulta el acceso a financiamiento futuro.
- Pérdidas Financieras: Las multas y penalidades afectan directamente el flujo de caja.
- Acciones Judiciales: Los procesos legales implican costos adicionales y riesgos de embargo.

Ventajas Clave de la Titulización de Facturas Impagadas
- Optimización de Flujos de Caja: Convierte cuentas por cobrar en liquidez inmediata.
- Reducción de Carga Tributaria: Permite deducir pérdidas por deudas incobrables del cálculo del Impuesto a la Renta.
- Respaldo Legal: Facilita el proceso judicial para el cobro de facturas.
- Mejora de la Gestión Financiera: Ofrece un registro claro y negociable de las cuentas por cobrar.
- Seguridad para los Inversionistas: Cavali garantiza la transparencia y respaldo de los títulos.
Beneficios Tributarios de la Titulización de Facturas
El Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, en su artículo 21, inciso f, establece que las empresas pueden deducir como pérdida las facturas incobrables de su base imponible, siempre que cumplan los siguientes requisitos:
- Deuda Vencida y Evidencia de Incobrabilidad:
- La deuda debe estar vencida.
- Debe demostrarse la morosidad o dificultades financieras del deudor mediante gestiones de cobranza, protesto de documentos, inicio de procesos judiciales, o que hayan pasado más de 12 meses desde el vencimiento.
- Registro Contable Obligatorio:
- La provisión debe estar registrada en el Libro de Inventarios y Balances al cierre del ejercicio.
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Conclusión
El cumplimiento de las obligaciones relacionadas con las facturas negociables no solo garantiza el acceso a los beneficios financieros y fiscales asociados, sino que también protege a las empresas de sanciones severas que pueden impactar su reputación y estabilidad económica. Las normativas vigentes, respaldadas por entidades como la SUNAT y Cavali, promueven un marco transparente y seguro para estas operaciones.
Preguntas Frecuentes
¿Qué pasa si no se paga una factura negociable?
El titular puede iniciar acciones legales respaldadas por el mérito ejecutivo del título valor. Si el cobro es infructuoso, la empresa emisora puede deducirla como pérdida fiscal.
¿Cuáles son las sanciones más graves para los incumplimientos?
Multas de hasta 50 UIT, aplicables tanto a proveedores como adquirentes que cometan infracciones muy graves.
¿Qué entidades supervisan el cumplimiento de las obligaciones?
La SUNAT regula las obligaciones fiscales, Cavali respalda la seguridad de los títulos, y los tribunales gestionan las acciones legales.